Después de que Beijing devaluara el yuan a los niveles más bajos desde 2008, como respuesta a la imposición de nuevos aranceles del 10% por parte de Estados Unidos, el presidente Donald Trump cargó este lunes contra el gobierno de su par Xi Jinping: lo acusó de «manipulación de divisas».
Tras una serie de treguas iniciadas en diciembre del año pasado, la guerra comercial entre Estados Unidos y China parece haber entrado en una escalada de tensiones sin precedentes que está teniendo un efecto negativo en todas las proyecciones de crecimiento de la economía global.
De acuerdo al Banco Mundial el crecimiento esperado para 2019 es del 2,6%, por debajo de lo esperado debido a «riesgos substanciales» en el horizonte. Para el Fondo Monetario Internacional el aumento del PIB global será del 3,2%, pero aun así lo describe como «perezoso» ante los riesgos.
El jueves Trump anunció nuevos aranceles del 10% sobre productos chinos, valuados en 300.000 millones de dólares, que entrarán en vigencia el 1 de septiembre.
Se suman a los ya existentes aranceles del 25% sobre bienes por 250.000 millones de dólares, que fueron impuestos escalonadamente a lo largo del 2018 y 2019.
Este lunes, en consecuencia, el Banco Popular de China abandonó su valor de referencia de 6,9 yuanes por dólar fijado en diciembre y la moneda trepó a 7,0393 por dólar, superando la barrera de los 7 yuanes por primera vez desde el 2008, cuando comenzó la crisis financiera global.
La decisión de Beijing sacudió a los mercados en todo el mundo provocando fuertes caídas en Asia y Europa y una preferencia de los inversores por los bonos del Tesoro de Estados Unidos, el yen y el oro, entre otros activos percibidos como seguros ante la incertidumbre.
Fuente: Infobae.