El pasado 19 y 20 de septiembre, tuvo lugar en Cádiz el VII foro de pequeños despachos de auditores en el que se congregaron 200 economistas de toda España y Auditest SAP estuvo presente. Organizado por el Consejo General de Economistas Contables.
D. Salvador Marín, durante la conferencia inaugural, resaltó que “los pequeños y medianos despachos de auditoría son un apoyo fundamental y básico para millones de Pymes en Europa –y por tanto en España–, por el gran valor añadido que estas empresas reciben tanto a través de la auditoría como de otros servicios relacionados con la información financiera”.
Por su parte, D. Carlos Puig de Travy, incidió en que “persiste un riesgo sistémico en el sector por la alta concentración del mercado”. A este respecto, el presidente del REA extrajo algunos datos significativos del Informe del ICAC sobre la Situación de la Auditoría en España 2018 en el que se aprecia que el 68% de la facturación total del sector se concentra en siete compañías, otro 10% en sesenta compañías más, y las 1.133 compañías de auditoría restantes solamente tienen una cuota de mercado del 22%.
En este sentido, para Puig de Travy “es necesario abordar una mayor presencia en el mercado del sector de las pymes de auditoría, para lo que una medida eficaz podría ser la co-auditoría”.
Según el presidente de los economistas auditores, “son muchos los beneficios que pueden aportar la auditoría conjunta, entre ellos el refuerzo de la independencia del auditor, reduciendo por consiguiente el riesgo de familiaridad, y la potenciación de la calidad de la auditoría proporcionando mayores capacidades”.
“Fomentar las auditorías conjuntas lo contempla la misma reforma europea, proporcionando claros incentivos para que las entidades de interés público, adoptando este tipo de contratación, puedan disponer de un periodo de rotación superior.
Produce extrañeza que nuestras empresas cotizadas no se decanten por este tipo de contratación cuando en países de nuestro entorno como Francia y Reino Unido sí lo hacen”, concluyó Puig de Travy.
Otro aspecto que se puso de manifiesto durante las jornadas, fue el relativo a los límites de la auditoría obligatoria en nuestro país en comparación a otros países de la UE.
Así, mientras que en España solo se tienen que auditar de forma obligatoria las empresas con 5.700.000 millones de volumen neto de negocio y 50 empleados o más –en consonancia con el resto de países de nuestro entorno–, encontramos países tan próximos como Francia o Italia, en los que el volumen de negocio requerido para auditarse de manera obligatoria es más bajo (3.100.000 € en Francia y 2.000.000 € en Italia), dato a tener en consideración si tenemos en cuenta que la proporción de pymes en España es superior al de estos dos países.
En definitiva, un congreso bien organizado que nos ha servido para poner en común las necesidades y expectativas de nuestro sector.